Un día con historia.

No dejo de pensar cómo podemos olvidar un día tan importante para nosotras, un día en el que deberíamos de estar orgullosas por ser como somos. 

Nadie pide nacer ni dejar dejar de hacerlo, simplemente nacemos, pero a la mujer (a diferencia que a los hombre), desde que nace, se le enseña a poner la mesa, a recoger, a ser ordenada, pero sobretodo limpia. 

Para muchos hombres machistas, las mujeres somos un objeto sexual, solo servimos para dar a luz, pero tampoco voy a dejar fuera a las mujeres, lo que más me duele es que alguna de nosotras renunciemos a la libertad de expresión, a la libertad de opinión por cuestiones (desde mi punto de vista), ridículas. 

No creamos que por ser mujeres tenemos o dejamos de tener opiniones, libertades, derechos; no lo creamos por que esto no es así. No creo que hayan trabajos para  mujeres, ni pensamientos de mujeres, creo que todo esto lo hemos estado pensando por muchas prohibiciones únicamente a la cultura y decisión de la mujer en estos últimos siglos. 

    

No pensemos que nuestro lugar es estar en la cocina, o detrás de un velo. Nuestro lugar, al igual que el de los hombres, esta repartido por todo el universo. Está bien, no seremos iguales físicamente, pero si tenemos el derecho de tener las mismas oportunidades, los mismos trabajos, el mismo sueldo, pero sin embargo esto es así, y lo peor es que sucede y seguirá sucediendo a lo largo del tiempo si seguimos permitiendo. 

Antiguamente (no hace mucho tiempo, cincuenta años atrás), era una deshonra para la familia que una mujer fuese madre soltera, las humillaban, las abusaban, pero a nadie le importaba porque era una cualquiera, pero nunca se habló del hombre que se acostó con ella, la que tal vez la violó, eso no les importaba porque era la mujer la que se suponía que lo permitía. 

Parecerá una bobería, pero en los anuncios de televisión no salen hombres anunciando productos de limpieza, ni cuando se cae un niño y anuncian una tirita o alcohol sale un hombre. Pero son embargo, no podemos olvidarnos de ellos en un anuncio de coches, un anuncio de desodorante, o en cualquier anuncio que sea para 'hombres' 

Todos tenemos derechos a ser libres, no importa el color de la piel, ni el género; lo único que importa es la belleza de tu personalidad.